Los adaptógenos son hierbas que actúan como esteroides naturales para mejorar la salud y reforzar la inmunidad. Estas hierbas contienen compuestos denominados fitoquímicos (los alimentos vegetales contienen miles de sustancias químicas naturales que potencian la capacidad del organismo para luchar contra las enfermedades). Muchas hierbas adaptógenas proceden de culturas asiáticas en las que la gente vive mucho más tiempo. Algunos adaptógenos se utilizan para combatir la ansiedad, la depresión, la fatiga, el insomnio, la hipertensión, la diabetes, las enfermedades cardiacas, el cáncer e incluso para ralentizar el proceso de envejecimiento. Estas sustancias ayudan al organismo a adaptarse al estrés físico, emocional y ambiental. Actúan aumentando la resistencia a los factores estresantes y mejorando la salud en general. Los adaptógenos pueden reducir los niveles de estrés, por lo que muchas personas los utilizan para superar la ansiedad y la depresión. También pueden ayudar con el insomnio y la fatiga. Algunos adaptógenos pueden incluso mejorar el rendimiento deportivo.

Existen muchos tipos diferentes de adaptógenos, como extractos de hierbas, hongos e incluso sustancias químicas. Muchos adaptógenos son de origen natural, como el ginseng, el muérdago (Ashwagandha), la rodiola (Rhodiola), el eleuterococo, el hongo cordyceps y la raíz de la pimienta de jengibre (Maca). Se producen otros adaptógenos, como extractos, comprimidos, polvos, etc. de las hierbas mencionadas.

 

Uso histórico de los adaptógenos

Aunque muchas de las hierbas que ahora se consideran adaptógenos se han utilizado durante siglos con fines terapéuticos, no fue hasta principios del siglo XX cuando se descubrieron sus propiedades únicas, cuando los científicos empezaron a estudiar las hierbas tradicionales utilizadas en la medicina china. Estudiaron cada hierba para determinar qué propiedades las hacen únicas y cómo pueden utilizarse para apoyar los sistemas del cuerpo y promover una salud óptima. Desde entonces, la comunidad científica ha explorado e investigado estas hierbas, y los médicos y herbolarios las han utilizado para tratar una amplia gama de dolencias y promover estilos de vida saludables. Hoy en día, el término "adaptógeno" se ha convertido en el nombre aceptado para estas hierbas, lo que ha ayudado a informar al mundo moderno sobre sus diversos beneficios.

 

Beneficios de los adaptógenos

Aunque cada adaptógeno tiene propiedades y beneficios específicos, hay algunos beneficios comunes que conviene conocer:

- Mantiene los niveles normales de las hormonas del estrés. Uno de los beneficios más importantes de los adaptógenos es su capacidad para ayudar a regular los niveles normales de las hormonas del estrés. Esto es especialmente cierto en el caso de la ansiedad, que a menudo es causada por altos niveles de hormonas del estrés como el cortisol. Se ha demostrado que algunos adaptógenos, como el Reishi y la Rhodiola, mantienen niveles saludables de cortisol, ayudan a calmar la ansiedad y favorecen la relajación, la Ashwagandha, ayuda a mantener niveles saludables de cortisol y serotonina, lo que contribuye a proporcionar una sensación de relajación tranquila sin la somnolencia que provocan fármacos como las benzodiacepinas (depresores del sistema nervioso central, 'tranquilizantes'). Aquí se explica qué es la serotonina y qué hay que saber sobre ella.

- Mantiene niveles de energía saludables. Se ha demostrado que los adaptógenos favorecen la concentración y ayudan a prevenir el estrés, la ansiedad y la fatiga. 

- Favorecen un sistema inmunitario sano. Los adaptógenos protegen contra el estrés y las infecciones como los resfriados y la gripe.

 

Cómo actúan los adaptógenos

Existen varias teorías sobre el funcionamiento de los adaptógenos. Una de las explicaciones más comunes es que los adaptógenos actúan manteniendo el equilibrio hormonal. Dado que el estrés, la mala alimentación y los estilos de vida poco saludables pueden provocar un desequilibrio de las hormonas de nuestro cuerpo, como el cortisol, la dopamina (un compuesto químico natural producido en el cuerpo, un neurotransmisor) y la serotonina (una sustancia biológicamente activa, una hormona y un neurotransmisor, un neurotransmisor monoamina, sintetizado en el cerebro a partir del triptófano), se ha demostrado que los adaptógenos pueden ayudar a restablecer un equilibrio hormonal saludable. Muchos adaptógenos actúan aumentando los niveles de hormonas clave como la serotonina y disminuyendo los niveles de hormonas del estrés como el cortisol. Otra explicación común del funcionamiento de los adaptógenos es que ayudan al cuerpo a producir más sustancias químicas naturales, como los antioxidantes, que a menudo no se obtienen en cantidad suficiente de los alimentos. Lea más sobre qué son los antioxidantes y por qué son necesarios aquí.

 

Riesgos y efectos secundarios

Aunque en general es seguro tomar adaptógenos, existen algunos efectos secundarios comunes que hay que tener en cuenta, así como ciertos grupos que no deberían tomarlos. Dado que cada adaptógeno tiene propiedades y beneficios únicos, diferentes hierbas pueden ser más o menos adecuadas para diferentes personas:

- La Rhodiola no debe ser utilizada por personas con hipertensión o que tomen medicación para la tensión arterial. Lea más sobre qué son las radiolas aquí.

- Las mujeres embarazadas deben evitar la ashwagandha, ya que puede provocar contracciones uterinas. Lea más sobre qué es la ashwaganda aquí.

 

¿Cómo se utilizan los adaptógenos?

No es difícil incorporar los adaptógenos a su dieta y rutina diarias, ya que puede encontrar estos alimentos enriquecidos en el supermercado. Los adaptógenos pueden tomarse solos o en combinación con otros suplementos. Algunas personas añaden un adaptógeno a su dieta y luego añaden más. A otros les gusta probar diferentes combinaciones. Pueden combinarse con otras hierbas, tomarse en infusión o en forma de polvo o cápsulas de adaptógenos. Todos los métodos son aceptables y útiles, lo importante es elegir el que más le convenga y le guste.